Dios dice: “Echa un vistazo a la época del arca de Noé: la humanidad era profundamente corrupta, se había desviado de la bendición de Dios, Él ya no cuidaba más de ella, y había perdido Sus promesas. Vivía en las tinieblas, sin la luz de Dios. Así pues, los hombres se volvieron licenciosos por naturaleza, abandonados a sí mismos a una depravación horrible. Tales hombres ya no podían recibir la promesa de Dios; no eran dignos de ver el rostro de Dios, ni de oír Su voz, porque lo habían abandonado, habían dejado de lado todo lo que Él les había concedido, y se habían olvidado de las enseñanzas de Dios. Su corazón se apartaba más y más de Dios, y conforme lo hacía, se volvieron depravados más allá de toda razón y humanidad, y cada vez más malvados. Así pues, cada vez se acercaron más a la muerte, y cayeron bajo la ira y el castigo de Dios. Sólo Noé adoró a Dios y se apartó del mal, y por eso fue capaz de oír Su voz, y Sus instrucciones. Él construyó el arca siguiendo las instrucciones de la palabra de Dios, y reunió a toda forma de criaturas vivientes. Y de esta manera, una vez que todo se había preparado, Dios desató Su destrucción sobre el mundo. Sólo Noé y los siete miembros de su familia sobrevivieron a la destrucción, porque Noé adoró a Jehová y se apartó del mal”.
De “La Palabra manifestada en carne”
De las palabras de Dios, podemos ver que las personas en la época de Noé eran profundamente corruptas por Satanás, llevaron una vida licenciosa, todos negaron y se resistieron a Dios, al final Dios destruyó el mundo con la inundación, sólo Noé y sus sietes miembros de la familia sobrevivieron, por que Noé tuvo verdadera fe en Dios, temió a Dios y se apartó del mal, hizo lo que dijo Dios, era un hombre que obedecía verdaderamente a Dios. Debido a que sólo Noé y su familia obedecieron las palabras de Dios y subieron al arca, por lo que fueron salvados por Dios. Y miramos a la época actual, los desastres ocurren cada vez más graves y con más frecuencia por todas partes del mundo, las personas se vuelven más y más malvadas y degeneradas, están llenas de violencia, los casos de asesinato, incendio, violación y robo pasan a menudo, el hombre se preocupa sólo de comer, beber, buscar el placer y satisfacción carnal, siendo lujurioso perdiendo su humanidad y razón… Estos hechos son suficientes para demostrar que ahora estamos en los últimos días, ¡es el día de Noé que la Biblia predijo! Sólo obedeciendo y practicando las palabras de Dios como Noé, podremos ser salvados por Dios en desastres. Les compartimos la película Los días de Noé han llegado para que tengan oportunidad de recibir la salvación de Dios en desastres.