¡Hola! hermanos y hermanas de La etapa del amor.
Estoy agotada durante el día y no puedo dormir lo suficiente en la noche. Así que no quiero tener reuniones a tiempo porque siento que estaba limitada por ellas. Creo que está bien hablar con alguien cuando lo necesito. No sé cuál es el problema con mi estado, ¿Cómo puedo resolverlo?
Anjing
Hola hermana Anjing,
No estamos dispuestos a tener reuniones y tener un punto de vista tal que podamos hablar con alguien cuando lo necesitemos, lo cual se debe a que no entendemos qué es la verdadera creencia en Dios y la importancia de tener reuniones. ¡Gracias al Señor! Me gustaría compartir algo de comprensión sobre este aspecto. Espero que pueda beneficiarte mucho.
¿Qué es Verdaderamente Creer en Dios?
Todos sabemos que el objetivo de Dios al crear al hombre desde el principio es que nos pide que lo glorifiquemos y lo adoremos en la tierra. Jesucristo dijo: “Amaras al Señor tu Dios con todo tu corazon, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el grande y el primer mandamiento” (Mateo 22:37-38). Como creyentes en el Señor, debemos creer en Dios y adorar a Dios antes que nada y mantener una relación normal con Dios. Tener reuniones, orar, comunicar la verdad y cantar himnos para alabar a Dios son el decoro que los cristianos deben hacer y la responsabilidad que nosotros, como seres creados, debemos cumplir. Las palabras de Dios dicen: “Hay algunas personas cuya creencia nunca ha sido reconocida en el corazón de Dios. En otras palabras, Él no reconoce a estas personas como seguidores suyos, porque no elogia su creencia. […] Consideran que creer en Dios es una especie de pasatiempo de aficionado, tratan a Dios simplemente como un sustento espiritual. […] ¿Cómo mira Dios a estas personas? Las ve como no creyentes”. De esto podemos ver que a los ojos de Dios, somos incrédulos si creemos en Él con nuestras palabras, confiamos en Él en nuestros corazones y tratamos de creer en Él como sustento espiritual. El objetivo de la obra de Dios es salvarnos a nosotros que han sido corrompidos por Satanás. Los verdaderos creyentes en Dios siempre deben venir ante Dios, leer más las palabras de Dios y actuar de acuerdo con los requisitos de Dios y las palabras de Dios cuando les suceden las cosas. No viven en la vieja y el carácter satánico corrupto, sino que obedecen a la obra de Dios, persiguen expulsar el carácter satánico corrupto y tener cierto conocimiento sobre la obra de Dios, Su carácter y Su esencia. Esto es realmente creer en Dios. Y sólo de esta manera podemos ser elogiados y salvados por Dios, y finalmente ser llevados a Su reino. Por el contrario, si no tenemos una relación normal con Dios, no asistimos a las reuniones, no oramos a Dios ni tenemos comunión acerca de la verdad; sino que consideramos creer en Dios como una especie de pasatiempo aficionado, Dios verá nuestra creencia como una especie de fe, viéndonos como incrédulos. Entonces, aunque creemos en Él hasta el final, no podemos ser elogiados por Dios. No sólo perderemos la oportunidad de la salvación de Dios, sino que perderemos el valor y el significado de la vida como un ser creado.
La vida de la iglesia es vitalmente importante
Si queremos que nuestra fe sea aprobada por Dios y queremos recibir la salvación de Dios, debemos conocer la importancia de la vida de la iglesia. La Biblia dice, “No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos unos a otros, y mucho más al ver que el día se acerca” (Hebreos 10:25). “Además os digo, que si dos de vosotros se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan aquí en la tierra, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mateo 18:19). No tenemos un órgano que pueda recibir la verdad y es difícil para nosotros entender las verdades y los misterios en las palabras de Dios. Aunque simplemente hemos aprendido un poco del significado literal de las palabras de Dios, no conocemos las intenciones de Dios ni Sus requisitos del hombre en absoluto. De esta manera, aunque seguimos a Dios, no tenemos idea de cómo cumplir la voluntad de Dios y cómo satisfacer a Dios. Por lo tanto, en lo que hemos creído es el Dios de nuestras propias nociones y un Dios vago en el cielo. Tal creencia no es real. Sin embargo, cuando leemos las palabras de Dios en las reuniones con hermanos y hermanas, compartimos nuestro propio entendimiento acerca de las palabras de Dios y aprendemos la nueva luz de la comunión de los demás al vivir la vida de la iglesia, obtendremos más. Especialmente cuando no entendemos las palabras de Dios, podemos buscar la voluntad de Dios y orar a Dios con la misma mente, y entonces el Espíritu Santo obrará sobre nosotros. Podemos entender el significado implícito de las palabras de Dios a través de la iluminación y la guía del Espíritu Santo. A medida que vayamos conociendo la voluntad y los requisitos de Dios, tendremos una dirección y un objetivo. Las dificultades en nuestro trabajo y los problemas en la vida se resolverán debido a nuestra comprensión de la verdad, que nos hará relajarnos y liberarnos. Por lo tanto, no nos enredamos en el mundo secular. Sólo si seguimos luchando por la voluntad y los requisitos de Dios, podemos caminar por el camino de la salvación de Dios.
Es difícil ganar la obra del Espíritu Santo si no vivimos la vida de la iglesia. No podemos entender la verdad y entrar en la realidad de la verdad sin la obra del Espíritu Santo. Así como así, no probaremos el gozo de la presencia de Dios, y mucho menos lograremos la salvación de Dios. Las palabras de Dios dicen: “Si tu vida espiritual no es normal, no puedes entender la obra actual de Dios; siempre sientes que es del todo incompatible con tus propias nociones; aunque estás dispuesto a seguirlo, te falta el empuje interno. Así que, independientemente de lo que Dios esté haciendo en la actualidad, las personas deben cooperar. Si las personas no colaboran, el Espíritu Santo no puede realizar Su obra, y si las personas no tienen un corazón de cooperación, no pueden alcanzar la obra del Espíritu Santo. […] Si las personas no colaboran con Dios ni buscan una entrada más profunda, Dios les quitará lo que una vez tuvieron. En su interior, las personas siempre tienen ansias de comodidad y preferirían tomar la ruta fácil. Quieren conseguir las promesas de Dios sin pagar precio alguno. Estos son los pensamientos extravagantes que hay en la humanidad. Ganar la vida sin pagar un precio; ¿qué ha sido alguna vez tan fácil?. Cuando alguien cree en Dios y busca entrar a la vida y busca un cambio en su carácter, debe pagar un precio y alcanzar un estado donde siempre siga a Dios sin importar lo que Él haga. Esto es algo que las personas deben hacer. Incluso si se sigue todo esto como una regla, uno debe atenerse a esto y, sin importar lo grandes que sean las pruebas, no se puede abandonar la relación normal con Dios. Se debe poder orar, mantener la vida de la iglesia y permanecer con los hermanos y hermanas. Cuando Dios te prueba, debes seguir buscando la verdad. Esto es lo mínimo para una vida espiritual”. De esto podemos ver sin importar cuán ocupado está nuestro trabajo y cuán cansados estamos, es importante para nosotros mantener una vida espiritual normal. Orar, leer la Palabra de Dios y tener reuniones son parte de la vida espiritual. No ganaremos el trabajo del Espíritu Santo si no somos capaces de mantener esto. Aunque estamos dispuestos a seguir a Dios en nuestro corazón, no tenemos confianza en nosotros mismos. Entonces, lo mínimo para nuestra creencia es orar, tener reuniones y leer las palabras de Dios con regularidad. Sólo manteniendo la vida espiritual y las reuniones, nuestra vida en espíritu puede ser fuerte.
Además, Satanás nos ha corrompido profundamente, no amamos las cosas positivas y nuestra naturaleza está llena del veneno de Satanás. Si no estamos a menudo cerca de Dios, es fácil para nosotros hundirnos en la trampa de Satanás, actuar en contra de la voluntad de Dios, lo que hará que Dios nos desprecie. Tener reuniones es una buena oportunidad para acercarse a Dios, a través de las cuales la relación entre Dios y nosotros puede estrecharse. Podemos vivir delante de Dios en todo momento y aceptar la observación de Dios, para que no seamos disolutos y degenerados, sino que vivamos bajo el cuidado y la protección de Dios. Mientras tanto, seremos claros y astutos en nuestro espíritu cuando tengamos una relación normal con Dios. Obtendremos discernimiento sobre lo que Dios detesta y lo que a Dios le gusta y permanecer del lado de Dios cuando las cosas nos suceden, no seguir la carne y a Satanás para rebelarse contra Dios y resistirlo. Por lo tanto, obtendremos más bendiciones de Dios. Entonces, la vida de la iglesia es de vital importancia si finalmente podemos ser salvados y aprobados por Dios.
Vivir en la presencia de Dios y bajo la protección de Dios.
Jesucristo dijo: “Porque mi yugo es fácil y mi carga ligera” (Mateo 11:30). Nuestra vida que el Señor da es ligera. Y espera que podamos vivir una vida libre y relajada, no tan cansada. Pero, ¿por qué siempre sentimos que nuestro trabajo es tan difícil que no queremos tener reuniones? Estos pensamientos son todos de Satanás y existe su engaño dentro. Dios dice: “Lo que Dios quiere hacer en el hombre es justo lo que Satanás quiere destruir y lo que Satanás quiere destruir se expresa a través del hombre sin estar oculto en lo absoluto. […] La destrucción de Satanás en la humanidad también se representa claramente, cada vez son más depravados y sus condiciones se están hundiendo cada vez más bajo. Si es lo suficientemente grave podrían ser capturados por Satanás”. Satanás es un enemigo de Dios. En todos los aspectos se opone a Dios y a menudo actúa sobre nuestra debilidad fatal para perturbar nuestra relación normal con Dios, dejándonos seguir y cuidar nuestra carne. Su propósito es hacernos apartarnos de Dios y perseguir la vida depravada y decadente y así lograr tragarnos. Si siempre nos acomodamos y satisfacemos el deseo carnal, estaremos más y más lejos de Dios para que prevalezcan las conspiraciones de Satanás. Por lo tanto, bajo estas circunstancias, debemos acercarnos más a Dios y estar más cerca de Dios, orar más a Él y aprender a confiar en Él, pero no a abandonar la vida de la iglesia. Debemos decidirnos para satisfacer a Dios delante de él. Cuando tengamos la determinación de cooperar con Dios, Satanás se apresurará a escapar tan pronto como vea que su plan no funciona en nosotros. Ya no sentiremos que estamos obligados por las reuniones mientras estamos en una buena situación. Por el contrario, pensaremos que tener reuniones es una forma de disfrutar el amor de Dios.
¡Gracias por la dirección de Dios! Hermana Anjing, eso es todo para nuestra confraternidad. Espero que la interacción de hoy sea útil para ti. Si tienes alguna pregunta, podemos discutirla más adelante …
Aprender más: Estudios bíblicos cristianos
Fuente: Estudiar la Biblia
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